Albergues en Cortona

Paola es maravillosa. Me atendió con gran amabilidad y, como yo tenía dificultad para subir las escaleras, ella me ayudó con mis maletas. La reserva en este Ostello fue casualidad porque me anularon la reserva en Arezzo que tenía en esos días por una avería en el hotel de Arezzo y encontré el maravilloso Ostello San Marco en Cortona, a dos paradas de tren antes de llegar a Arezzo. Me urgía encontrar otro hospedaje y apareció este Ostello. Es limpio, hay silencio. Me alojé en una habitación femenina de 8 camas en la que estuve sola las cuatro noches. Los baños y las duchas están en el pasillo pero son amplios y suficientes. Abajo hay un comedor con muchos bancos y cafetera de barman, microondas, tostadora y hervidor grande de agua. Esto último se puede utilizar sin costo. El café de barman te lo haces tú y dejas allí las monedas del precio. Hay dulces a buen precio, refrescos y agua en una nevera aparte. No hay televisión, pero sí un buen internet. El Ostello es un antiguo convento. El check in, en enero cuando yo estuve, era de 5 a 8 de la tarde, creo recordar y Paola ayuda informando, atendiendo con amabilidad y profesionalidad. Es una maravillosa recepcionista y gerente. Cuando me marché, ella me ayudó de nuevo con mis maletas y me acompañó a la parada del minibus cercana para llegar a la estación de Camucia, pues este Ostello está en Cortona y para llegar a la estación más cercana, Camucia, puedes coger un minibus que, por unos 1,50 euros comprando los tickets en un estanco, vas y vienes por aquella zona. Es muy cómodo y puntual. El Ostello San Marco está situado muy cerca del mirador principal de Cortona, con unas bellísimas vistas de la Toscana y una parte del lago Trasimeno. Sin duda, por ubicación, precio, limpieza, descanso y profesionalidad de Paola, este Ostello es una opción estupenda para unas vacaciones en Cortona y para visitar los alrededores. Puede alojarse gente de todas las edades. La toalla pequeña está incluida y las sábanas.